Atributos de Dios


         Mientras Espíritus imperfectos, aún somos incapaces de comprender la grandiosidad de Dios. A medida que evolucionamos y nos depuramos, haremos una idea más justa y más exacta (todavía incompleta, aún) de la verdadera naturaleza de Dios.

         Las leyes perfectas del Universo demuestran la sabiduría y las cualidades de Dios, que todo conduce con armonía y equilibrio.

         La justicia del Creador se muestra en el derecho que fue dado al ser humano y a todos los seres de evolucionaren. La reencarnación es la oportunidad de evolucionar que la justicia y el amor divino nos proporcionan.

         Sólo Dios posee todos los atributos (cualidades que caracterizan un ser) en perfección absoluta.

         Dios es eterno. Si Él tuviera un comienzo, tendría salido del nada, o entonces, tendría, sido creado por un ser anterior. Es así que, poco a poco, remontamos al infinito y a la eternidad.

         Dios es inmutable. Si Él estuviera sujeto a los cambios, las leyes que gobiernan el Universo no tendrían ninguna estabilidad.

         Dios es inmaterial. Su naturaleza si distingue de todo lo que llamamos materia, pues de outra manera Él no sería inmutable, estando sujeto a los cambios de la materia.

         Dios es único. Si hubieran muchos dioses, no habría unidad de vistas, ni un poder en la organización del Universo.

         Dios es todo-poderoso. Si no hubiera el poder soberano, habría alguna cosa más poderosa o tan poderosa cuanto Él que, así, no tendría hecho todas las cosas; y aquello que Él no hubiera hecho sería obra de otro dios.

         Dios es soberanamente justo y bueno. La sabiduría providencial de las leyes divinas se revela en las menores y em las mayores cosas, y esta sabiduría no nos permite dudar de su justicia, ni tampoco de su bondad.

Lea también: El Libro de los Espíritus, cuestiones 10 a 13 y
La Génesis, capítulo II, ítems 08 a 09.