Clase de cierre III

         Oración inicial

         Primer momento: poner los evangelizandos en un círculo (alrededor de la mesa), organizando una "charla" acerca del año que pasó. Preguntarles lo que más les gustó, lo que no les gustó, si les gustaría que algo fuera diferente, dejándoles libres para que den su opinión. Acordar que algunas sugerencias podrán ser llevadas a la dirección del Departamento de la Niñez e de la Juventud para seren analizadas (muchos de ellos pueden sugerir cosas que no dependan solamente del evangelizador, como por ejemplo más tiempo de clase, por eso es importante explicar que hay una jerarquía y normas a seren cumplidas).

         Según momento: Técnica – Unión y Cooperación.

         La técnica empieza con la imagen de Jesús utilizada en el cartel de la puerta. Recortar la figura de acuerdo con el número de evangelizandos que compareció en las clases durante el año, mismo que en el día no estén todos presentes.

         Poner las partes de la figura recortada esparcidas por el aula en sitios que ellos puedan buscar (detrás de las cortinas, debajo de la mesa y de las sillas). Cada uno irá buscar y traer solamente una parte, no pudiendo coger más que un trozo del todo.

         Cuando vuelvan de la busca, el evangelizador solicitará que los evangelizandos intenten montar la figura pegando las partes en el centro de una cartulina (después vamos a pegar).

         Cada uno con su pieza, intentará montar el rompe cabeza. Ellos solamente lograrán montar perfectamente si todos los evangelizandos que participan del grupo estuvieran presentes en este día. Si no, algunas piezas irán faltar, pero mismo así deberán montar como puedan.

         Observar el resultado final y hacer la reflexión sobre unión y cooperación a partir de los siguientes aspectos:

         * Si todos vinieron y, por eso, consiguieron montar el cartel con todas las piezas, reflexionar sobre la importancia de cada uno haber contribuido con su parte para el montaje. Esa pieza representa la individualidad, las experiencias de cada uno, el trabajo y las ideas que cada uno trae para el grupo.

         * Si algunos no vinieron y, por eso, no consiguieron montar el cartel con todas las piezas, exponer que sería importante para la realización de la tarea que todos estuvieran presentes, sin dejar de valorar lo que puede ser hecho. Para la pandilla, cada uno es importante porque siempre tendrán dudas, experiencias a compartir y alguien siempre tendrá vivido o estará viviendo situación semejante, trayendo algún relato o información, lo que puede ayudar el grupo como un todo. También exponer la importancia de la participación de todos en las discusiones.

         * Resaltar también la importancia de todos ayudaren con su empeño y trabajo para el montaje del cartel y no solamente con su parte del rompe cabeza para que llegasen a un buen resultado final. Al final se puede escribir en la cartulina algo del tipo: “¿Querido evangelizando, has percibido que este dibujo no está completo? ¡Es que está faltando tu parte! Participa de la evangelización en (poner el año) en el (escribir el nombre del centro espírita) y haga parte de este equipo. Usted saldrá ganador.”

         Se puede también pegar corazones con los nombres de los evangelizandos que están para valorarles y dejar el cartel en la casa para que en las vacaciones los evangelizandos puedan verlo.

         Tercer momento: preguntar si mismo incompleto ellos consiguen identificar quién está en la figura. Respuesta: Jesús

         Acordar la primera clase Jesús – ¡Quién tiene Jesús en el corazón nunca está solo! Traer el cartel de la puerta y preguntar si ellos se han mejorado en aquella actitud escrita en el corazón con el nombre de ellos. Cada uno hablará de uno mismo.

         Después de entregar a cada uno una foto de la pandilla y un corazón igual al del cartel de la puerta con un alfilete, para que ellos pongan en la ropa (corazón de cartulina roja donde diga “Quien tiene Jesús en el corazón nunca está solo” recordando el corazón de nuestro cartel de la puerta) y decir que el año está terminando pero que el año que viene deseamos todos nuevamente con nosotros. Podrá, también, ser entregue un íma con el corazón para poner en la nevera.

         Decir aún que ellos no están con nosotros simplemente para aprender pero también para enseñarnos y enseñar a los demás. Distribuir más un corazón rojo con el mismo decir y pedir para que ellos den aquel corazón a alguien, enseñando lo que aprendemos sobre Jesús (que nunca estamos solos y que siempre podemos hablar con Jesús a través de la Oración).

         Oración de cierre

         Sugerencia: tercer ciclo.

         Evangelizadoras: Camila, Emanuelle e Juliana – Centro Espírita Caminho da Prece.

         Traducción: Pâmela Martins.




         

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